EL PILOTO AUTOMÁTICO VS EL PRESENTE

Si buscamos piloto automático en internet nos va a salir información sobre aviones y automóviles, sin embargo, hoy en día es posible ver en redes sociales como muchas personas lo utilizan para referirse a un concepto ligado a la psicología, pero ¿Qué significa?

El piloto automático es ese modo con el cual funcionamos de forma automática, sin ser conscientes de lo que estamos haciendo. Es una forma de estar en el mundo que habitamos, en este modo hacemos las cosas por inercia y funcionamos en nuestra vida cotidiana sin prestar atención, como si fuésemos robots o zombis.

¿Te ha pasado que te encuentras en la calle, en tu trabajo, universidad o en cualquier lugar sin saber siquiera como llegaste ahí? O ¿te ha pasado que mientras lees un libro de repente te das cuenta de que en realidad leíste muchas páginas, pero no has entendido nada? Eso es el piloto automático y en general podemos reconocerlo una vez salimos de este modo, cuando nos damos cuenta y vemos el trayecto que recorrimos sin estar ahí.

El pasado, el futuro y el presente

Cuando estamos en piloto automático realizamos actividades mientras nuestra mente está pensando en otras cosas. En otras palabras, nuestro cuerpo y mente se encuentran separados de alguna forma, y por eso mientras nos lavamos los dientes, comemos o conversamos con alguien no estamos realmente ahí, sino en nuestros pensamientos, en nuestra mente. 

Eckhart Tolle en su libro “El poder del ahora” (2012) reflexiona acerca de la importancia de vivir en el aquí y el ahora (el presente) y postula que en nuestra mente existe una corriente constante de pensamientos, los cuales se orientan al pasado y al futuro. El problema para este autor está en que nos identificamos con estos pensamientos, creemos que somos nuestra mente y esto nos produce sufrimiento porque en realidad somos más que nuestros pensamientos.

Entonces, tomando en consideración las palabras de Tolle, podemos observar que cuando estamos en piloto automático nuestra atención se encuentra sumergida en nuestra mente, específicamente habitando el pasado y el futuro. En el pasado podemos ver los recuerdos, las culpas, nuestras vivencias, todo aquello que sucedió y como lo recordamos, lo que fue y lo que pudo ser, por esto se asocia principalmente a la melancolía y la tristeza. Mientras tanto, en el futuro están las preocupaciones, lo que tenemos que hacer luego, las cosas pendientes y los miles de posibles sucesos que pueden o no ocurrir, por lo cual el futuro tiene íntima relación con la ansiedad. 

Podemos decir que el estar en piloto automático nos impide vivir en el presente ya que mientras nos desenvolvemos en nuestra vida diaria, nuestra mente está transitando entre estos dos lugares (el pasado y el futuro) y nos perdemos de experimentar todas aquellas cosas que realmente estamos haciendo aquí y ahora, donde se encuentra nuestro cuerpo teniendo experiencias. Ya no estamos comiendo, saboreando la comida, sino pensando en aquello que sucedió hace 2 meses o en esa prueba que tenemos mañana.  

Tanto fuera como dentro

El modo de piloto automático, al no permitirnos habitar el presente nos hace perder de vista aquel mundo que existe afuera, aquel que contiene a la naturaleza, las personas, las experiencias. Sin embargo, también nos hace perder vista ese mundo que existe dentro de nosotros, nos priva de observar qué ocurre con nuestro cuerpo, que estamos sintiendo, que emociones estamos experimentando y que estamos pensando en el momento presente.

Observar nuestro mundo interno es importante para poder conocernos a nosotrxs mismxs, por un lado, explorar nuestras emociones nos ayuda a entenderlas y regularlas. Por otro lado, reconocer nuestros pensamientos nos permite ver cuál es nuestro relato mental desde el cual nos movemos en el mundo y también observar esta corriente de pensamientos que tanto nos atrapa en nuestra cotidianeidad y que no nos está permitiendo experimentar el aquí y el ahora.

El observar nuestro mundo interno no es una tarea sencilla porque implica hacernos conscientes de aspectos de nosotrxs mismxs, los cuales muchas veces no son fáciles de aceptar y mucho menos de trabajar. Sin embargo, poder conocernos y observar qué sucede con nosotrxs en el momento presente es una manera de salir del piloto automático y habitar el presente.

Técnicas para salir del piloto automático

En primer lugar, una de las técnicas que nos permite observar nuestros pensamientos y así salir del piloto automático es escribir los pensamientos que vayan surgiendo en nuestra mente, ya que, al hacerlo, nos hacemos conscientes de estos pensamientos y al leerlos generamos una distancia que nos hace posible observarlos de manera más objetiva y como lo que realmente son, pensamientos. 

En segundo lugar, una de las prácticas más conocidas para lograr situarnos en el presente es la meditación, con ella podemos observar aquello que ocurre en nuestro cuerpo, las sensaciones, los pensamientos, las emociones, los dolores, todo aquello que surge en el momento. La meditación nos ayuda a conectarnos con nosotrxs mismxs y a observar la corriente constante de pensamientos con la que cohabitamos en nuestro diario vivir para luego dejarla pasar y conectarnos con nuestra experiencia presente.

Hay distintos tipos de meditaciones, en general algunas personas dicen que es más sencillo empezar con las meditaciones guiadas, en las cuales, tal como su nombre lo dice, una voz te guía en el proceso. Esto ocurre principalmente porque al comenzar a meditar, a algunas personas les cuesta convivir con el silencio y la quietud que implica la práctica, ya que como fue mencionado antes, conectar con unx mismx a veces resulta complejo. Existe una amplia variedad de meditaciones guiadas, hay quienes las realizan de manera presencial y también se pueden encontrar en internet. Sin embargo, es una práctica que todxs podemos realizar en nuestros hogares y que no requiere de más elementos que nuestra propia presencia.

El piloto automático como forma de supervivencia

El piloto automático también se puede entender como una forma de supervivencia, ya que actuar de forma automática nos permite ahorrar energía y de alguna manera, estamos programados para sobrevivir. 

El mundo en el que vivimos actualmente está lleno de estímulos, los cuales exigen de nosotros una cierta energía. Asimismo, muchas personas funcionamos en base a rutinas, desde que somos pequeñxs en el colegio se nos enseña a actuar en base a reglas, horarios, etc. Esto continua luego en la universidad y/o en el trabajo que realizamos, tenemos un horario de entrada y de salida, un horario para almorzar y así. De alguna forma, podríamos pensar que estas rutinas también se relacionan con el piloto automático, ya que luego de realizar muchas veces lo mismo y de la misma manera, nuestro organismo aprende, se adapta y puede llegar a hacerlo de manera automática, lo cual nos permite ahorrar energía en actividades que a veces pueden resultar tediosas. Sin embargo, incluso fuera de las actividades tediosas, en aquellas que representan un disfrute para nosotros aún podemos actuar en piloto automático.

Reflexiones

El tema del piloto automático nos abre la puerta a varias preguntas y reflexiones, por ejemplo, ¿Es posible salir del piloto automático completamente? En el caso de que la respuesta sea no ¿En qué grado podemos salir de este? Y ¿Qué es lo que resulta más sano para nosotros, considerando que nos permite ahorrar energía? ¿Será que es una función necesaria para los seres humanos? Y si fuera así ¿Cómo podemos lograr un equilibrio entre vivir en este modo automático y habitar el presente? 

En conclusión, el piloto automático es un fenómeno que todos los seres humanos hemos experimentado, que puede entenderse como un modo de supervivencia, y, por lo tanto, relacionarse con el entorno en el que vivimos. Asimismo, el piloto automático no nos permite habitar el presente, debido a que mientras nuestro cuerpo se encuentra en un lugar, nuestra mente está en otro, principalmente en pensamientos, los cuales generalmente se refieren al pasado o al futuro. Esto nos afecta directamente y nos hace perder de vista lo que realmente estamos viviendo en el momento, tanto en el mundo que existe fuera, como en nuestro mundo interno. Al respecto, existen prácticas que nos pueden ayudar a aprender a observar, entender e incluso salir del piloto automático, entre estas destaca la meditación y la escritura de pensamientos.

Recomendaciones:

  • Libro: El poder del ahora – Eckhart Tolle
  • Película: Soul – Disney-Pixar

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